¿Cómo conservar la tarta de Santiago para que siempre esté fresca?
Si hay un postre típico gallego conocido en todo el mundo, ese es la tarta de Santiago. Este pastel es una deliciosa y esponjosa combinación de almendra, azúcar, huevos y limón que se hornea para obtener su sabor característico.
Como cualquier otro pastel, la tarta de Santiago debe ser almacenada y conservada correctamente para mantener su frescura durante el mayor tiempo posible. Pero ¿cómo lo hacemos? A continuación, compartimos algunos consejos útiles y fáciles de seguir para disfrutar de esta tarta tradicional gallega en su mejor estado.
1. Almacenamiento en el frigorífico
La tarta de Santiago se puede conservar en el frigorífico a una temperatura entre 4 y 7 grados Celsius. Para ello, solo tienes que envolver la tarta en papel film o colocarla en un recipiente hermético y meterla en el frigorífico. De esta forma, podrás alargar su vida útil por unos días más.
2. Congelación
Una forma de mantener la tarta de Santiago fresca durante un periodo más largo de tiempo es congelarla. Para ello, asegúrate de que la tarta haya enfriado completamente y colócala en una bolsa o caja hermética que no permita la entrada de aire. Etiqueta la bolsa o caja con la fecha y nombre del producto y métela en el congelador.
Cuando quieras comer la tarta, sácala del congelador y colócala en la mesa por un par de horas para que se descongele antes de servirla. Así podrás disfrutarla durante varios meses.
3. Conservación a temperatura ambiente
Si quieres conservar la tarta de Santiago durante varios días sin necesidad de refrigerarla ni congelarla, puedes hacerlo colocándola en un recipiente con tapa hermética y enróscalo bien. Asegúrate de mantener la tarta en un lugar fresco y seco, lejos de fuentes de calor o luz solar.
4. Evita cortar la tarta antes de tiempo
Cortar la tarta antes de tiempo hace que el interior se seque y pierda su textura esponjosa. Si no vas a comer toda la tarta de una sola vez, es mejor cortar solo la porción que consumes y dejar el resto en la nevera como una pieza entera.
5. Aprovecha los restos
Si tienes algunos restos de la tarta de Santiago, no los desperdicies. Puedes utilizarlos en otras preparaciones y recetas, como en el relleno de unos cupcakes, en las galletas o como parte de una mezcla para hacer helado. ¡Las posibilidades son infinitas!
Siguiendo estos sencillos, pero efectivos, consejos, puedes prolongar la vida útil de tu tarta de Santiago y disfrutar de su frescura y sabor durante más tiempo. ¡Buen provecho!
- Aviso: Todos los tiempos de conservación pueden variar en función de la calidad de la tarta y los ingredientes utilizados en su elaboración.